El domingo se llevó a cabo la segunda etapa de las carreras de Adidas: el Split 9K en el Valle del Conejo. No existe carrera en la Marquesa que no sea emocionante y ésta, sin duda, nos llevó al límite.
Desde la carretera se percibía la emoción de los participantes. El tráfico no nos importó, pues sabíamos que llegaríamos a correr. Amigos, conocidos, o simplemente corredores, llegamos con una actitud que hizo el ambiente muy agradable y familiar. El evento se prestó para ir hasta con las mascotas y vivir una experiencia diferente.
Salimos en bloques separados cada diez minutos. Esto es por logística, pues al ser una ruta de trail, las veredas son angostas y, con tanta gente, no habría espacio para correr. Creo que la organización y la cooperación de los corredores para salir en el horario que nos tocaba, fue excelente.
Me gustó mucho la ruta; fue demandante, del kilómetro tres hasta el seis aproximadamente, fue pura subida. Podías escuchar la respiración agitada de los corredores, sin embargo, siempre apoyándose unos a otros. Y de verdad que una palabra de ánimo o de aliento en plena cuesta, a todos nos agrada. Después vino una parte plana y una bajada que ¡cómo disfrutamos!
Casi llegando a la meta se escuchaban las porras y los gritos de la gente. Nos recibieron con aplausos y todos sentimos una gran satisfacción al cruzar esa meta.

¿Qué sigue? Entrenar duro. Sabemos que la preparación para un maratón no es cualquier cosa, por eso debemos ir incrementando poco a poco la intensidad y duración de los entrenamientos, además de acompañar este camino con una adecuada alimentación y descanso.
El próximo Split se llevará a cabo el día 13 de mayo, donde nos esperan 12 Kilómetros.